A Octavos de Final

El Sevilla es a día de hoy uno de los 16 mejores equipos de Europa. Y lo es por méritos propios, no sólo tras el partido de ayer sino tras las tres victorias anteriores.

La primera parte fue plácida para los nuestros, que se adelantaron con un tempranero gol en el minuto 13 de Jesús Navas tras una magnífica asistencia de O Fabuloso. Por una vez se cambiaron las tornas y fue el brasileño quién le dio el pase de gol al Duende de Los Palacios. La primera parte fue buena, destacando la lesión de un Arouna Koné que parecía más entonado que en otras ocasiones y al que parece que le persigue la mala suerte. Negredo fue su sustituto a la medi hora de juego.

En la segunda parte vimos otro partido. Un Sevilla que parecía que lo veía tan fácil y que permitió que los alemanes se vinieran arriba. Así, iba sumando diferentes ocasiones de gol… pero a veces un gran Javi Varas y otras veces la inoperancia de los jugadores alemanes mantenían el 1 a 0 en el marcador.  El punto clave del partido llegó en el minuto 70, cuando Aldo Duscher que acababa de entrar diez minutos antes en sustitución de Romaric sufrió un tirón muscular en el muslo, y con los tres cambios hechos se decidió no forzar al argentino (¿alguién ha oído hablar del gol del cojo?) y jugar los últimos 20 minutos con diez jugadores.

Y claro, el cántaro se rompió, con un buen gol del serbio Kuzmanovic, que sonó con fuerzapara el Sevilla este verano, de un espléndido chute de fuera del área que tocó en un jugador alemán y ante el que nada pudo hacer Javi Varas.

De ahí al final, con la sensación de que ambos equipos se conformaban con el empate, el partido no dio para más. Quedémonos con los positivos. Somos uno de los 16 mejores equipos de Europa a falta de dos jornadas. ¿Hay alguien en la Península Ibérica que pueda presumir de lo mismo?